Algunas verdades

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SEMANA 3

SEMANA 3

El poder del pecado

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DÍA 3

DÍA 4

DÍA 5

DÍA 6

DÍA 7

La meditación de ayer es extremadamente significativa. No podemos dejarla en el pasado.

Es necesario profundizar en la revelación espiritual para que todos nuestros sentidos sean afectados en pro de la transformación.

Te invitamos a repasar algunos conceptos y a responder con absoluta sinceridad los interrogantes que aparecen en el día de hoy:

PRIMERA VERDAD

El pecado de un líder, sea en la iglesia o la nación, tiene serias consecuencias para las personas que están bajo su autoridad. “Por causa del pecado de Salomón, castigaré a los descendientes de David”, 1º Reyes 11:39 (NTV).

  • ¿Estás o estuviste en alguna función de liderazgo mientras consumías pornografía? ¿Eres consciente de que tu pecado afectó a todos, aunque nadie más lo supiera?

Cuando David le preguntó al Señor por qué los trataba tan mal, Dios le respondió: “Si ahora ustedes no tienen qué comer, la culpa es de Saúl… pues él mató a muchos gabaonitas”, 2º Samuel 21:1 (TLA). “Joacaz… rey de Israel… hizo lo que no le gustaba al Señor… Entonces el Señor se enojó con Israel…”, 2º Reyes 13:1-3 (PDT).

Creer que no existe relación entre el pecado de un gobernante o líder y la desgracia en la que está su nación o iglesia es la mayor ventaja que se le pueda dar al enemigo.

Lo mismo sucede en el ámbito del hogar. Dios ha delegado en los padres la responsabilidad de ser protectores de sus hijos. Si los padres llevan vidas santas la familia será bendecida, pero si desobedecen a Dios entonces el diablo tendrá la autoridad que necesita para pulverizar la familia.

SEGUNDA VERDAD

“Que ninguno de ustedes se endurezca por el… pecado”, Hebreos 3:13 (NVI). Además, los líderes desobedientes endurecen a los pecadores en sus pecados. En lugar de hacer conocer la verdad del evangelio al pueblo, la ocultan poniendo cojines de paz bajo sus conciencias y diciendo: “Paz, paz, todo está bien”.

  • ¿Tus sentidos espirituales perciben cómo el pecado endurece el corazón?

Cuando pecamos nos unimos a Satanás en su lucha contra Dios. “El que peca demuestra pertenecer a Satanás…”, 1ª Juan 3:8 (NT BAD).

TERCERA VERDAD

Cuando Pablo dice que luchamos “contra espíritus malignos de los lugares celestiales” hay quienes interpretan “lugares celestiales” como “en las cosas celestiales”. No luchamos por trivialidades sino por lo celestial, ¡por el cielo mismo!

  • ¿Entiendes qué es lo que está en juego en esta guerra?

Las cosas eternas. El pecado es el peor negocio de la vida porque pone en riesgo la bendición más grande ofrecida por Dios al hombre. Si vas a luchar contra el pecado, hazlo en serio. Tírate sobre su cuello y no permitas que respire ni se levante.

CUARTA VERDAD

El diablo es el inventor del pecado, por eso se llama al pecado “las obras del diablo”, 1ª Juan 3:8. Además, es el gran instigador al pecado, por eso se lo llama “el tentador”, Mateo 4:3. Siempre está dándonos ideas para pecar.

  • Volvemos a reiterarte las preguntas de ayer. ¿Qué vamos a hacer? ¿Usaremos la inteligencia que Dios nos dio para nuevos pecados o para vivir en integridad? ¿Nos seguiremos revolcando en los mismos pecados pasados creyendo que Dios no nos pedirá cuentas de ellos?

Si crees que puedes deslizar tus pecados debajo de la mesa sin que nadie, ni siquiera Dios los vea, has sido vilmente engañado por el diablo quien ha estado enseñando este mismo truco desde Adán, que pensaba esconderse tras una hoja de higuera. No seamos ilusos. Nada puede cubrir nuestro pecado de la mirada de Dios. El Señor nos pedirá cuentas, en esta vida o en la otra, pero algún día tendremos que responder.

Queremos extenderte la invitación más revolucionaria de tu vida.

Haz un alto ahora mismo.
No postergues ni un minuto tu oración.
Arrepiéntete de todo corazón.

No te apoyes en tu resolución para perseverar en la santidad sino que, con corazón quebrado acude al único que puede quitar tu mancha y perdonarte de verdad. Al único que puede reprender al diablo y hacerte libre en el sentido más pleno.

¡Vuélvete a Dios!