SEMANA 3
El poder del pecado
DÍA 1
DÍA 2
DÍA 3
DÍA 4
DÍA 5
DÍA 6
DÍA 7
Una semana renovada en la fe y la esperanza
Durante esta semana deberás estar atento y con el espíritu despierto, si es que quieres escapar de esta trampa mortal. Te recomendamos que te unas a nosotros en las vigilias de los martes a las 5 AM y, los jueves, al ayuno congregacional. Solo con armas espirituales podrás derrotar esta potestad que ahoga tu vida y limita tu futuro.
Ingresa a nuestro sitio web www.iglesiadelaciudad.com.ar e indaga en todas las alternativas y recursos que ponemos a tu disposición para avanzar en el camino espiritual, derribando toda mentira del diablo y alcanzando las bendiciones que Dios anhela que tengas. Los recursos que te ofrecemos son numerosos y, muchos de ellos a costo cero. Nada impide tu bendición y no tienes excusas. ¡Aprovecha todas las opciones para tu crecimiento y avance!
El valor de la sinceridad
¿Recuerdas la conversación que tuvo Jesús con la mujer samaritana?
Jesús le dijo: “Ve a llamar a tu esposo y vuelve. Ella le contestó: No tengo esposo. Jesús le dijo: Así es. Dices la verdad al decir que no tienes esposo. Has tenido cinco maridos y el hombre con quien vives ahora tampoco es tu marido”, Juan 4:16-17, PDT.
Por vía de contraste, observa las consecuencias que acaecieron sobre los que faltaron a la verdad: “…Pedro dijo: Ananías, ¿por qué permitiste que Satanás entrara en tu corazón? Mentiste y trataste de engañar al Espíritu Santo. Vendiste el terreno, pero ¿por qué te quedaste con parte del dinero? El terreno era tuyo antes de venderlo, pudiste haber dispuesto del dinero a tu gusto. ¿Por qué se te ocurrió eso? ¡Le mentiste a Dios, no a los hombres!”, Hechos 5:3-4, PDT.
No intentemos aparentar ‘sinceridad’. No intentemos que otros vean que ‘hacemos el esfuerzo’, cuando en realidad no es verdad. Dios espera que respondas a este llamado que te está haciendo a la santidad con un sí absoluto. Del otro lado de tu sinceridad te espera la amistad con Dios. “El rey aprecia al de corazón sincero, y brinda su amistad al que habla con gracia”, Proverbios 22:11, DHH.
Si quieres avances trascendentes deberás ser absolutamente sincero/a. Dios todo lo sabe. No maquilles tu pecado. Cuanto más franco seas, más rápida será la resolución.
Sinceramente es difícil, pero crucial
Sincerarse es uno de los aspectos más dificultosos, pues todos encubrimos nuestros errores e ignoramos el verdadero peso de nuestros pecados. No logramos ver la profundidad de nuestra maldad. Siempre es más fácil ver en otros lo que hacen mal.
En el consumo crónico de pornografía, la vergüenza ha dado paso al acostumbramiento y el placer ha mitigado la culpa. Casi todos los consumidores crónicos conocen de sus pensamientos sexuales, sus deseos y toda su lujuria, pero minimizan ese bagaje y creen que los demás son iguales a ellos, solo que lo disimulan. No conciben una vida de pureza, con pensamientos de bien y sin esa energía o pulsión sexual que devora la vida de oración y consagración. Este aspecto es profundo y debe ser analizado.
¿Quieres descubrir la vida sin el aliciente de la pornografía? ¿Crees que será insípida sin ese ‘secreto refugio’? Tienes que tomar una decisión. No podrás avanzar en el camino de la santidad sin abandonar los pensamientos que te atan a la pornografía. No podrás encontrarte con la presencia de Dios, a menos que renuncies a tu placer por lo pornográfico.
Pídele a Dios que Él se manifieste. Cristo quiere fortalecerte. Y cuando camines de la mano de Dios y el poder de su presencia verás cuán estúpido fue consumir pornografía.
El reiterar este tema no implica que dudamos de tu decisión por el cambio, pero conocemos las artimañas del diablo. Él intentará que retornes al camino de pecado. Cada vez que reafirmas tu compromiso con el nuevo camino, ganas terreno frente al enemigo.